No me mateen!!!!

Je. Hola, sé que probablemente muchas de ustedes ahora mismo quisieran golpearme & mandarme a los Vulturis x no haber publicado en tanto tiempo ¿cierto?...

Pero la verdad es que el siguiente capitulo es un poco dificil de escribir [no me preguten x qe, ya qe no yo lo sé] y no eh tenido una muy buena semana, que digamos y eso no ah ayudado a mi inpiración ¬¬

El siguiente capitulo ya esta empezado, por la cual les puedo asegurar que se publicará MAÑANA [si! XD] lo punico qe les pido es un poco de paciencia ^O^

Bnooo... tmbn les qería decir que ya creé la pagina para fans de este blog en Facebook! Oh si, estoy muy feliz, así que espero que todas las que tengan Face, se hagan fans. Aquí el link:

http://www.facebook.com/#!/pages/The-Renesmee-Cullen-Love-Story/348549380259?ref=ts


Y tmbn les dejo algunas fotitos de Sam [mi perrita] ^O^ para qe conozcan quien me impide publicar [aveces] XD



[Se ve como una bolita negra XD]

Grx & bye! [besos]


p.d: también voten x el blog de mi amiga MaPa [ Un hermoso rayo de luz]

Aqui:http://laesquinadetucalle.blogspot.com/ Gracias!

Especial de San Valentín. Onee Shoot. Feliz día [2/2]

Especial de San Valentín. Onee Shoot. Feliz día [2/2]


Empezaba a amanecer y algunos rayos de luz daban con las trejas del techo de aquella pequeña cabaña sumergida en el bosque.
Después de que aparecieran los primeros rayos, el cielo se nubló ligeramente por una nubecillas, dándole a la pequeña cuidad de Forks, un ambiente gris rosáceo, muy romántico. Tal ves era la Madre Naturaleza que quería ayudar a crear un ambiente más románico, exactamente en el día de San Valentín, o quizá era sólo una coincidencia; pero Nessie, sentada junto a su ventana, se inclinaba más por la primera opción.
Ella suspiró.
Temía que su regalo no fuera suficiente para mostrarle a su Jacob cuánto la amaba, pero bueno, lo había hecho ella, con sus propias manos, eso debería de contar algo ¿cierto?.
Volvió a suspirar mientras se mordía el labio.
Decidió que ya era suficiente de tanta holgazanería y se metió al baño a darse una ducha.
Al salir, Alice ya la esperaba en su vestidor, con un atuendo especial para ella y una gran sonrisa en su rostro.
- ¡Feliz día de San Valentín!
- Feliz día, Alice – dijo Renesmee mientras le daba un pequeño abrazo. – No creas que se olvidó tu regalo.
Nessie fue hasta su buró y de un cajoncito sacó un paquete rectangular forrado con papel rosa y un moño rojo. Volvió con Alice y se lo entregó y ella casi con impaciencia rasgó el envoltorio. Al ver su contenido soltó un agudo gritito de alegría.
- ¡No puede ser Nessie!, ¡¡Tienes que estar bromeando!!.
- Son totalmente originales, ve la firma.
Alice soltó otro grito.
Eran los primeros bosquejos de la famosa diseñadora de moda Coco Chanel, de las diseñadoras favoritas de Alice.
- Mil gracias Nessie – dijo con una sonrisa gigante – aquí está lo que te pondrás hoy. – dijo mientras señalaba un diván donde había ropa.
Después de eso, salió corriendo en dirección a la mansión, pues moría por mostrárselos a los demás.
Nessie, rió por lo bajo para después ponerse el vestido color rosa pastel con mallas blancas que Alice le había elegido…



-Ya vendrá no te preocupes. – la voz de Bella sacó a Nessie de sus pensamientos.
- Uhh… ¿qué?. – dijo Nessie mientras alzaba la vista de su cuaderno de dibujo.
- Jake, vendrá.
- No quedamos en nada. – dijo Nessie tristemente mientras volvía a bajar la mirada.
A cada segundo que pasaba lejos de Jacob, se sentía mas insignificante, como si ella no fuera importante como para regalarle un poco de tiempo en el día de San Valentín.
En eso el sonido de unas llantas contra la tierra llamó su atención. No era el sonido de cualquier coche, era de un coche con tapicería color blanco, con un deliciosos aroma a licántropo, uno que ella conocía bastante bien…
De un salto se paró de la mesa corrió hasta el ventanal que daba al frente de la mansión.
Un Thunderbird del 86 se estaba estacionando enfrente a las escalerillas.
Jacob se bajó de el auto mientras llevaba una camisa color negra ajustada al cuerpo y Nessie sintió una ola de calor recorrer su cuerpo.
Antes de que él tocara la puerta, ella ya estaba en el umbral con una sonrisa que le iluminaba el rostro.
- Feliz día – le dijo a su Jacob.
- Feliz día – respondió él para después inclinarse y darle un beso en la mejilla.
A ella se le colorearon las mejillas y sonrió tímidamente. Después, Jacob le mostró lo que traía en la espalda y a ella se le cayó la mandíbula.
- ¿Rosas? – preguntó un poco confundida
- ¿No te gustan? – la preocupación apareció en sus ojos marrones.
- No, me encantan… pero no entiendo por qué.
- Hace unos días me dijiste que querías jugar a ser humana, y bien, los humanos hacen esto. – dijo mientras una encantadora sonrisa aparecía en su rostro.
Su sonrisa se vió reflejada en el rostro de ella y no pudo hacer más que lanzársele al cuello mientras lo abrazaba fuertemente.
- Y bien, ¿ahora que haría un humano? – dijo con una sonrisa mientras se sentaba en el asiento del copiloto.
-Es sorpresa. – dijo con una sonrisa pícara.



- Dos para “El latido de mi corazón” por favor. – dijo Jacob a la señorita de la taquilla.
- Esa película no ah tenido muchas críticas buenas… -comentó ella mientras miraba hacia otro lado.
- Te encantarás, ya verás. – dijo él, confiado de sí mismo.

- Bien, ¿qué te pareció? – dijo él, al salir de la sala.
- B-bien… - dijo un poco acalorada y mareada por los besos de Jacob.
Su corazón estaba latiendo a mil por hora, al igual que el de él, y aunque intentaba controlarse, no era muy buena fingiendo.
-Gracias Jake – dijo Nessie mientras caminaban de la mano por el oscuro estacionamiento
-De nada Nessie, cuando quieras podemos volver a venir. – dijo con una sonrisa.
- No me refiero a eso Jake – él la miró confundido – No me malentiendas, esto me encantó. – dijo mientras sonreía – Te agradecía por todo Jake, literalmente por todo, desde que nací, ahora y por siempre, Jake. Eres lo mejor que me ah pasado y ya que no encuentro las palabras suficientes para decírtelo…
Ella se puso de puntillas y tomó el rostro de Jacob entre sus delgadas manos, para después posar sus labios sobre los suyos y darse un beso muy dulce, mientras mentalmente le decía: “Soy tuya, para toda la eternidad”.
Jacob no pudo hacer más que sonreírle con toda sinceridad para después decirle:
- Te amo Nessie, eres todo para mí. – y después, besarla de nuevo…


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Lo siento por la demora!
Espero que les haya gustado! no estoy muy segura con este cap. pero de todos modos lo subo, ya que lo había prometido.

Especial de San valentín. Feliz día [1/2]

Especial de San Valentín. One Shoot ubicado unos meses antes de este blog. Feliz día.


La noche era fresca.
El viento soplaba desde la playa de La Push, trayendo consigo un casi imperceptible olor a sal.
Y aunque hacía frío, ninguno de los dos lo sentía, ya que el cuerpo del otro de brindaba el justo calor que necesitaba.
Ella se removió semidormida en el pecho de él, mientras aspiraba su delicioso y adictivo aroma, una y otra vez. Él trató de mantenerse lo mas quieto posible, en un intento para no despertarla. Cerró sus brazos más entorno a ella, mientras deseaba que nada nunca los separase.
Él había sido especialmente para ella, y ella para él. Dos piezas que se unían perfectamente, que habían tenido la suerte de encontrarse.
Su imprimación a él la había sellado las heridas de un amor no correspondido, y a ella le dio un amigo, confidente, hermano y amante para siempre…
Ella escuchaba el rítmico latido del corazón de su licántropo, mientras disfrutaba la suave brisa y el frío de la noche; soltó un suspiro y él se percató de que ya estaba despierta.
- Creí que estabas dormida – le dijo él con dulzura.
- No podía desperdiciar tan bonita noche – “y compañía” pensó.
Después depositó un dulce y pequeño beso en sus labios.
Ambos sonrieron con calidez.
Ella volvió a recostarse en su pecho para después dirigir su mirada enamorada hacia las estrellas, para fingir que las miraba, cuando en realidad no estaba más que pensando en su razón de ser: su Jacob; mientras que sin darse cuenta, él hacía lo mismo.
De pronto, una duda surgió en la mente de la chica semi-humana.
- ¿Cómo es tener una vida “normal”? – preguntó, mientras hacía las comillas aéreas.
La pregunta lo tomó por sorpresa, pero aún así, respondió:
- Yo una vez tuve una vida normal, ya sabes, cuando pensaba que nuestro mundo era un lugar cuerdo. – el rió ante el recuerdo – y era … bastante aburrido.
- ¿Aburrido? – preguntó ella, llena de curiosidad.
- Si, sólo ere un humano común y corriente. No puedes transformarte en un lobo gigante y correr a toda velocidad por el bosque.
Ella le sonrió con dulzura, mientras intentaba imaginar cómo sería su vida si fuera humana.
- ¿Y qué hacían en Día de San Valentín?.
Él primero rió y ella empezó a ruborizarse, pensando en que había hecho una pregunta sumamente tonta.
- Pues, se regalaban flores, peluches, chocolates. Se salía al cine, etc.
- Oh, ok…
Ella se intentaba imaginar como si fuera una humana, caminando con un ramo de rosas hacia la entrada de un cine, de la mano de Jacob.
A este punto podrías pensar: “Son adolescentes, y aunque sean licántropos o semi-humanos, alguna vez deben de haber hecho algo normal, ¿cierto?”. Pero para ellos, las cosas “normales” eran: largas carreras entre el espeso bosque, cálidas fogatas a la luz de la luna, competencias en coches deportivos traídos desde Italia y viajes en lomo de lobos gigantes.
Ella suspiró mientras ponía su nívea mano en el brazo desnudo de él, y después le dijo mentalmente: “Me gustaría, aunque sea por un día, jugar a que mi vida es completamente cuerda, a que no existen los personajes fantásticos y a que soy una simple humana…”
Su pensamiento se transmitió borroso al final, ya que se había vuelto a quedar dormida…
Él se mordió el labio mientras acercaba más su cuerpo al de ella, y en su mente se trazaba un plan…


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Lo siento por el atraso!
La parte dos el miércoles.

Máscara. Cap. 52

- Hey, ¡Espera! – dije para después pararme del banco de piedra y salir tras de él…
Seguía temblando y al levantarme, mis piernas estaban débiles por lo que me caí un par de veces, llenándome el pantalón y las manos de polvo.
Ethan corría tan rápido que apenas y distinguía un borrón oscuro.
- ¡Ethan detente! – le grité mientras seguí corriendo tras él.
Los pasillos de los Vulturi eran tan largos y enredados como los de un laberinto. Algunos tenían el piso desnivelado y piedras desgastadas por el paso de los años que te hacían caer.
Por alguna razón después de ese “incidente” con el vampiro que se había colado, me sentía en peligro todo el tiempo mientras corría, era como si alguien me estuviera viendo.
Me empezaba a arder el pecho de tanto que había corrido, y justo cuando pensaba en darme por vencida, la figura de Ethan se paró en seco. Necesité de algunos pasos más para bajar la velocidad y llegar caminando hasta a él.
Me detuve hasta que estuve a unos 30 cm de él, pero antes de que pudiera decir algo, él se volteó bruscamente y dijo:
- ¿Qué quieres? – su voz destilaba una extraña mezcla de ira y dulzura.
Su cortante tono de voz me desconcertó, ya que, las palabras pueden mentir, pero las miradas nunca; y la suya era de total nostalgia por algo o por alguien…
Ethan encarnó una ceja, intentando que respondiera.
- Y-yo sólo te quería dar las gracias. – susurré, todavía desconcertada.
- No me des las gracias, sólo evita tener que estar salvándote.
Ahí fue cuando todo el desconcierto se me pasó de sopetón y le dio paso a el enojo.
- ¿Perdón? – dije, mientras empezaba a hervir por dentro.
- Que no quiero estar salvándote todo el tiempo.
- ¡¡Yo pude haberme defendido sola!! Y, ¿todo el tiempo?, sólo ah sido una vez. – el tono de mi voz subió algunas octavas.
- Estabas aterrada, apenas y podías respirar, ¿cómo ibas a defenderte?
- Y-y-yoo… - balbuceé patéticamente.
- Y si, ah sido más de una vez.- continuó - Por ejemplo, cuando Aro estaba apunto de arrancarte la cabeza o cuando convencí a los demás de que no mataran a tu familia – al recordar lo último sentí como mi corazón se estrujó violentamente.
Sentí como si se empezara a abrir un hoyo en mi pecho, cada vez más grande a cada segundo que pasaba.
Cerré los ojos para contener las lágrimas.
- Oh, no. – escuché que susurraba Ethan – Oye, ehm… lo siento- dijo mientras ponía una mano en mi hombro – no quería… lastimarte, creo que me sobrepasé. Lo siento.
Me sorprendió tanto su repentino cambio de humor que, sorprendida, abrí los ojos y aunque algunas lágrimas habían escapado de mis ojos, pude ver con claridad la sinceridad de su disculpa.
- ¿Qué? – dijo, después de que lo observé durante unos segundos.
- N-nada, sólo que… ¿por qué cambiaste de humos tan rápidamente?.
Mi pregunta lo tomó por sorpresa, pareció dudar unos segundo pero después dijo:
- Hay, demonios. Se supone que no debería de estar diciéndote esto, es más se supone que ni siquiera debería estar contigo ahora, me lo prometí a mí mismo…
- ¿Te lo prometiste?
- Mantenerme alejado de ti.
- ¿Por qué?
- Por alguna extraña razón, siento esta … necesidad de cuidar de ti y asegurarme de que estás bien. – confesó.
- Oh…
De repente me sentí mal por haberle gritado, al final de cuentas, el sólo quería protegerme.
- ¿Y por qué tienes que mantenerte alejado de mí? – las preguntas salían sin cesar de mi boca.
Ethan hizo una mueca de dolor, y deseé no haber preguntado eso. Con esa mueca de dolo siguió mirando hacia el suelo durante unos segundos, como si estuviera deliberando decirme o no algo. Estaba a punto de decirle que no era necesario decírmelo, cuando por fin habló:
- Yo… no lo sé. . dijo, pero había algo en su voz que me decía que no era toda la verdad.
Aún así no lo quise presionar.
- Bueno, … gracias … de nuevo – le dije mientras trataba de esbozar una sonrisa.
- Fue todo un placer – dijo mientras imitaba a un caballero y tomaba mi mano para rozarla con sus labios.
Ambos reímos.

- ¿Y no sabe a mal? – me preguntó Ethan mientras me entregaba un paquete de galletas saladas.
- No. – dije mientras las abría – Pruébalas.
Extendí el paquete abierto hasta donde estaba y él me miró recelosamente.
El viento sopló fuerte en la pequeña terraza de la torre Sur del castillo de los Vulturis; alborotando mi cabello y el de Ethan.
- Hace más de cincuenta años que no como comida humana. – dijo mientras entrecerraba los ojos.
Aunque los ojos de Ethan eran de un color rojo intenso, no me asustaban. Había algo cálido en ellos, algo que me hacía sentir protegida, incluso en mis momentos más oscuros.
- ¿¿Y desde ese entonces no has probado nada?? – pregunté sorprendida, ya que la mayoría de los vampiros “civilizados” se habían visto atrapados por la curiosidad humana y habían sido obligados a probar comida humana, delante de otros humanos, para hacer creer que eran humanos.
- No.
- Bien, pues ésta será tu primera prueba de comida humana en tu vida vampírica. – le dije mientras movía el paquete en la cara.
Me siguió mirando recelosamente.
- Oh ¡vamos!. Sólo una. – le sonreí para infundirle valor.
Él sólo rodó los ojos y sacó una galleta del empaque. Sin pensarlo dos veces se la metió a la boca y empezó a masticar.
Segundos después había galleta a medio masticar por todo el piso.
- ¡¡Sabe a tierra!! – me dijo mientras hacía una cara de asco e intentaba limpiarse la lengua.
No pude hacer más que reírme debido a sus gestos.
- ¡¡No sé cómo te gusta eso!! – gritó.
- Eso es lo bueno de se una semi-humana - le dije mientras sonreía – y aunque prefiero la sangre, esto no está nada mal.
Y a que los Vulturis no comían nada más que sangre humana – y yo no quería participar en eso -, decidí que me alimentaría sólo de comida humana. Se podía sobrevivir con eso.
Ethan me sonrió cálidamente.
Aunque sólo había pasado un poco menos de una semana y media desde que Ethan y yo hablamos por primera vez, ya nos habíamos convertido en muy bueno amigos. Al estar con él sentía una confianza instantánea, como si nos hubiéramos conocido desde hace años y apenas nos hubiéramos vuelto a reencontrar. Me sentía tan protegida con él como cuando lo estaba con … Jacob.
Sentí un ramalazo de dolor cuando lo recordé, y aunque intenté disimularlo, Ethan era muy observador.
- ¿Qué pasa? – dijo.
- N- nada – me apresuré a decir mientras intentaba componerme.
- Es por él, ¿cierto?
Bien sabía a quien se refería.
- No. – mentí.
- Bueno, como quieras – dijo, él ya sabía que yo había sacado la misma vena sadomasoquista de mi mamá – Tengo una idea para distraernos. – lo miré expectante mientras intentaba volver a meter todo esos sentimientos dentro de su caja – Juguemos a verdad o reto …



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"Just set them up to knock them out"
Starstrukk - 3oh!3 & Katy Perry

hola!! ^^ lo siento x publicar hasta ahora, pero tengo una bebé que cuidar.
Tiene mes y medio, se llama Sam y es de color negro [adivinen x qe le puse asi? XD].
Es mi nueva perrita, y al parecer tener un cachorro es parecido a tener un hijo.

Les estoy preparando su regalo del día se Sn. Valentín. Espero que esté listo ára mañan o el Domingo ^^

Eh leído algunos comentarios y en respueta a unos cuantos sólo tengo que decir: SI LEO SUS COMENTARIOS y si no me queren creer... allá ustedes ^O^.
También uno que decir que no le eh agradecido a una chica que me "dió" la idea de los Vulturis. Bien, sólo qiero decirles que io ya tengo tooooda la historia en borrados (sólo los puntos generales más importantes), incluso tengo una libreta. Así que ya sé lo que va a pasar desoués de esto, y aquello etc. Así que porfavor no se ofendan si no les "agradezco". Y si pusieron algo en los comentos y unos capitulos despues apareció en el blog, bueno ... supongo que las grandes emntes piensan igual ^^

Bueh, con eso me despido. Besos !

No se olviden de visitar mi otro blog.

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"I used to be love drunk, now I'm hangover."
Love Drunk - Boys like girls

"Déjala".Cap.51

Empezó a caminar hacia mí lentamente, como si estuviera acechando a su presa.
Se acercó tanto a mí que quedamos aun distancia de 20 centímetros.
- No hueles tan bien como ellos, pero eso no te quita lo delicioso.- dijo mientras olisqueaba mi aroma- Es una extraña mezcla. No me puedo quedar con las ganas de probar, ¿cierto?...
Sentí cómo sus dedos fríos como la nieve rozaban mi cálida mejilla, mientras miles de escalofríos me recorrían la espalda.
Mi corazón latía desbocado y me costaba respirar. Nunca había pensado que a la hora de que los Vulturis se alimentasen, yo sería la comida.
Cerré con fuerza los ojos, esperando que todo acabara pronto, y en cuanto lo hice me arrepentí. Miles de imágenes, recuerdos, olores y texturas llegaron a mi mente cono un enfurecido torbellino que revolvía más mi de por si ya nublada mente. Pero hubo dos recuerdos que no quemaron más: mi primera imagen de mamá, papá y yo como familia, y mi primer beso con Jacob.
Intenté desterrara con todas mis fuerzas este último recuerdo, ya que sabía que en esta situación sólo me causaría más dolor, pero éste había decidido avanzar; como si fuera un película, a la cual le hubieran puesto Play y no encontrara el control remoto para pararla.

El viento alzaba ligeramente una brisa salina que provenía del mar en la playa First Beach.
Mi cabello revoloteaba a mi alrededor mientras caminaba al lado de Jacob. Lo miré de solosayo y noté que él estaba haciendo lo mismo que yo.
Con una risita bajé la mirada y noté como me ponía roja como un tomate. Él solo rió sordamente.
De unos meses a esa fecha ya no miraba a Jake con los mismos ojos. Seguíamos siendo amigos, sí, pero algo dentro de mí había despertado, algo que me pedía a gritos quedarse con él, para siempre, pero no sólo como su mejor amiga. Algo que me rebasaba y me hacía sentir inquieta a cada segundo que estaba con él. Algo que me ponía impaciente por probar sus carnosos labios y que él probara los míos.
¿Pero que tal si él no sentía lo mismo por mí?.
El viento sopló aún más fuerte y mis cabellos se alborotaron aún más.
“Demonios. Seguramente mi cabello está horrible” pensé un poco molesta mientras intentaba arreglarlo. No quería que Jake me viera así.
En eso sentí que una cálida mano retiraba una de las mías de mi cabello.
Volteé a ver a Jake confundida.
- Aunque estés un poco despeinada, sigues viéndote muy bien – dijo con una sonrisa que me derretía.
- Gracias – dije con un hilillo de voz mientras me ponía roja y sentía como una extraña sensación fluía dentro de mí.
- No me tienes que dar las gracias, sólo estoy diciendo la verdad.
Esa extraña sensación aumentó dentro de mí y me mordí el labio inferior para evitar ponerme a dar de saltos y gritarle que lo amaba.
-Te reto a una carrera de aquí al mar – dijo con una sonrisa pícara.
- Está bien – acepté. Si había algo que me gustara, eso eran los retos.
-Pero hay que apostar algo – dijo con la misma sonrisa.
Se me ocurrió algo pero fui muy cobarde para decirlo en voz alta, así que sólo dije:
- ¿15 dólares?
- Se me ocurre otra cosa … un beso.
La sorpresa y alegría me golpearon de frente y con todo su poder. No pude evitar que una sonrisa del tamaño del Sol se dibujara en mi rostro.
- Hecho. – dije mientras estrechaba su gran mano.
- Uno … Dos … Tres.
Y ambos salimos disparados hacia la orilla del mar. Bajé la velocidad apropósito, dejando de Jacob ganara. Él se adentró al mar, hasta que éste llegó a sus rodillas. Me hizo una seña para que lo acompañara.
- Creo que perdí – dije simulando inocencia.
- Y creo que tú me debes algo – dijo con una sonrisa coqueta.
Alargó su mano y tomó la mía, sentí una corriente eléctrica al contacto con su piel. Puso mis manos en su espalda , para después poner una suya en mi espalda y la otra en mi mejilla. No me importó que parte de mi vestido – más corto de lo usual gracias a Alice – color verde azulado se estuviera mojando, sólo me importaba el momento, lo cerca que estaban sus labios, lo que estaba por sucedes y lo más importante: que esto era real.
Mi corazón empezó a palpitar frenéticamente y sentía que se me salía del pecho.
Acercó su rostro al mío, estábamos a sólo unos centímetros y yo me moría de las ganas por besarlo, cuando dijo:
- Nessie, no tenemos que hacer esto si no quieres, ¿está bien?. – esa mágica sensación que tenía en el pecho ahora había sido remplazada por angustia ¿se estaba echando para atrás? .
- ¿Q-que quieres decir? – dije mientras luchaba por mantener las lágrimas dentro de mis ojos.
- Maldición – susurró para él mismo mientras agachaba la cabeza. Busqué su mirada y prosiguió- Creo que tienes que saber que yo ya no te veo sólo como una amiga. No sé si sientes lo mismo por mí y si así lo es está bien, sabes que siempre te apoyaré. Pero si es lo contrario me lo debes de decir ahora por que … ¡Rayos, me está comiendo vivo esta incertidumbre!. Te juro que ahora lo único que veo es a ti, no veo el mar, el bosque, nada; sólo estás tú en mi mente.
No pude aguantar más las ganas de besarlo, así que en menos de lo que me había dado cuenta mis labios ya estaban sobre los suyos. Al principio ambos nos movimos ligeramente dudosos, lentamente, mientras el beso se volvía cada vez más dulce.
- Te amo – dijo cuando dejó de besarme.
- Yo también te amo…

El recuerdo me había calado hasta los huesos, quemándome en el camino. Allí fue cuando no pude más y dejé que algunas lágrimas se me escaparan, estaba apunto de rendirme, de dejar que ese sombrío vampiro me matara, cuando como por arte de magia se me ocurrió algo:
- Aro, - me miró confundido – él va a notar que no estoy y te va matar. No puedes hacerme daño. – dije decidida.
El vampiro dio dos pasos atrás y pensé que mi argumento había hecho efecto, pero unos segundos después, se empezó a reír estrenduosamente, tanto que parecía temblar de pies a cabeza.
Mi mente se confundió más de lo que ya estaba.
- ¿Hacerme algo a mí?, ¿Aro? – siguió riéndose – No soy un Vulturi niñita – dijo mientras señalaba detrás de él, lugar donde iría una capa si en verdad perteneciera a los Vulturi – así que no sabrá quién hizo todo el desastre cuando termine contigo.
“Cuando termine contigo”, su voz resonó macabramente en mi cabeza y temí en sus planes no sólo estuviese que fuera sus cena.
Me estremecí ante las posibilidades.
Su excreción volvió a sombría y se acercó a mí, esta vez más cerca que antes. Tenerlo tan cerca me causaba más que asco, repulsión. Y cuando se acercó a mi cuello hasta rozarlo con la nariz para oler mi fragancia me estremecí violentamente y me entraron náuseas.
Cerré los ojos y los apreté lo más fuerte que pude, mientras rezaba por que esto acabara rápido.
- Déjala. – un gruñido vino desde la oscuridad y ambos nos sobresaltamos.
Era Ethan quien gruñía amenazadoramente desde la oscuridad. Sus ojos color borgoña intenso refulgían de pura ira y estaba fijado en el esquelético vampiro que tenía frente a mí.
-Dije que la dejes. – un gruñido más fuerte salió de su pecho.
Su cuerpo estaba ligeramente encorvado, en una clara posición de ataque. Se veía mucho más grande de lo que era.
Una sensación de alivio se extendió por mi pecho, aunque sabía que Ethan todavía no había ganado esta batalla.
- ¡Wow, que miedo!. Un muchachito me va a hacer daño – dijo sarcásticamente.
- Vete si no quieres que te haga papilla.
- Oblígame. – lo retó el vampiro flacucho
Acto seguido sentí como una onda de expansión hacía estremecer todo el lugar. Eso me recordó a Bianca Olivier y al recordarla a ella, se me vinieron a la mente recuerdos no muy gratos, por lo cual los quité rápidamente de mi cabeza.
- Eso es sólo una probadita – dijo Ethan mientras encarnaba una ceja.
El vampiro lo miró fijamente a los ojos, con frustración escrita en la frente. Bufaba ligeramente y cada vez que se acercaba un paso hacia mí, toreando a Ethan, éste mandaba olas de expansión más y más fuertes.
Después de unos segundos de estarlo retando, Ethan se hartó y le mandó una realmente fuerte, que hizo que se estampara contra la pared, resquebrajándola.
El vampiro desconocido se levantó rápidamente, tratando de recuperar un poco de dignidad. Acto seguido, me miró a los ojos con una extraña mezcla de deseo e ira, lo cual hizo que me entraran horribles escalofríos, para después escapar hábilmente por las rendijas que había en el techo.
Pasaron unos segundos en silencio y escuchaba mi respiración entrecortada. Casi no podía creerme lo que acaba de pasar.
Me giré hacia donde estaba Ethan, pero éste me miraba con un poco de nostalgia e ira. Un torbellino de emociones me azotó. ¿por qué me miraba así?.
- G-graci… - empezaba a agradecerle cuando él se dio la media vuelta y sin decirme nada se fue.
Me confundí aún más.
- Hey, ¡Espera! – dije para después pararme del banco de piedra y salir tras de él…


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"I write you just to let you know that I'm alright. Can't say I'm sad to see you go 'cuz I'm not"
Here we go again - Paramore

Hi! ^O^
Lo siento por estar desaparecida tanto tiempo; estaba perdida en el espacio. XD
haha la verdad no. XD
Planeaba publicar ayer pero ayer en Puebla [capital] llovió, LITERALMENTE, todo el día!!. Y cuando llegué a mi casa alguien [ no quiero decir nombres, cof cof mi hermaro cof, cof] dejó un poqitín de la ventana abierta y se mjoaron toodas las conexiones de la compu, así que no la pude usar por 24 hras ¬¬.
Y el miércoles me dejaron un proyecto de hacer un bote para recliclar latas, entonces se me ocurrió una idea genialisima: hacer un robot! y que por la boca le metas las latas ^^. A mi punto de vista me quedó bastante bien, pero la maestra no me lo aceptó [ estúpida ] por que "es de cartón, y eso lo rompen". ¬¬
Pero bueeeehh!! aquí esta el cap ^^ [ maldito vampiro asqerozote! XD] espero que les gusteee! publicaré hasta el Lunes io creo... por que mañan me voi a Río Frío a disfrutar un poco de nieve ^^.

BLOG NUEVO!!! seep, escucharon bien. visítenlo. [es de una amiga y mio] ^^

Los blogs + pedidos [si, como el programa de TV] XD

Los blogs + pedidos

Los blogs + pedidos

Los blogs + pedidos

See ya! Besos. ^^

p.d. en la prox entrada hablaremos del nvo nombre del blog.

"Don't look up, just let them think. There's no place else you rather be."
Fences - Paramore.